dissabte, 5 de desembre del 2009

El Arte de la Inmoralidad


El siguiente texto pertenece al libro titulado El Arte de la Inteligencia, de Allen W. Dulles (en la fotografía). Dulles fue el primer director civil de la CIA y fundador e ideólogo de la agencia en la década de los 50.

La CIA, desde su creación, ha tenido como principal objetivo luchar contra todo el que fuera considerado enemigo de los Estados Unidos. Durante la Guerra Fría éste enemigo fue la URSS y el bloque soviético en su conjunto. Actualmente el enemigo es cualquiera que intente escapar de sus garras de dominación imperial.

Dulles se convirtió en director de la CIA en 1953. Durante su dirección, la CIA emprendió la Operación MK Ultra, un programa de investigación secreto que trataba de encontrar métodos para el control mental. A parte de eso, intervino en numerosos países que contaban con presidentes nacionalistas o de izquierdas: como es el caso de Mohammad Mosaddeq de Irán, al que derrocó en 1953 mediante un golpe de estado, estableciendo la dictadura monárquica del Sha Mohammad Reza Pahlevi. O como es el caso del gobierno del presidente Jacobo Árbenz de Guatemala, destituido en 1954 mediante un golpe militar organizado por la CIA porque, según palabras del propio Dulles "El régimen guatemalteco contaba con el apoyo total de la Rusia Soviética". El gobierno de Jacobo Árbenz fue sustituido por una junta de gobierno militar en la que fueron asesinados más de 60 mil guatemaltecos en los siguientes 30 años.

Su fin al frente de la CIA fue como consecuencia de la fallida operación de invasión de Playa Girón (Cuba) y varios intentos fallidos de asesinato contra Fidel Castro, utilizando a agentes reclutados de la Mafia de origen cubano residente en Miami y la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.


"Sembrando el caos en la Unión Soviética, sustituiremos sus valores, sin que sea percibido, por otros falsos, y les obligaremos a creer en ellos. Encontraremos a nuestros aliados y correligionarios en la propia Rusia. Episodio tras episodio se va a representar por sus proporciones una grandiosa tragedia, la de la muerte del más irreductible pueblo en la tierra, la tragedia de la definitiva e irreversible extinción de su autoconciencia. De la literatura y el arte, por ejemplo, haremos desaparecer su carga social. Deshabituaremos a los artistas, les quitaremos las ganas de dedicarse al arte, a la investigación de los procesos que se desarrollan en el interior de la sociedad. Literatura, cine, teatro, deberán reflejar y enaltecer los más bajos sentimientos humanos. Apoyaremos y encumbraremos por todos los medios a los denominados artistas, que comenzarán a sembrar e inculcar en la conciencia humana el culto del sexo, de la violencia, el sadismo, la traición. En una palabra: cualquier tipo de inmoralidad. En la dirección del estado crearemos el caos y la confusión. De una manera imperceptible, pero activa y constante, propiciaremos el despotismo de los funcionarios, el soborno, la corrupción, la falta de principios. La honradez y la honestidad serán ridiculizadas, innecesarias y convertidas en un vestigio del pasado. El descaro, la insolencia, el engaño y la mentira, el alcoholismo la drogadicción, el miedo irracional entre semejantes, la traición, el nacionalismo, la enemistad entre los pueblos, y ante todo el odio al pueblo ruso; todo esto es lo que vamos a cultivar hábilmente hasta que reviente como el capullo de una flor.

Sólo unos pocos acertaran a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando la manera de calumniarles, desacreditarles y señalarles como desechos de la sociedad. Haremos parecer chabacanos los fundamentos de la moralidad, destruyéndolos. Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos, pervertiremos."

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada