diumenge, 7 de febrer del 2010

Ni socialista ni obrero

Hasta ahora, cada vez que escuchaba que el Partido ¿Socialista? ¿Obrero? Español (PSOE) es un partido de izquierdas, me reía. Ahora ya no. Siempre he sido consciente, que es gracias a la desinformación generalizada que se sostiene éste falso mito, ya que los argumentos para defender esta idea són la legalización de los matrimonios entre homosexuales, la ley del aborto, el estatut de Catalunya, etc... Simple maquillaje. Y es que la política económica es la que define si un gobierno es de izquierdas o de derechas.

No fueron otros, sino el PSOE quienes, con Felipe González (señor X) en el gobierno, iniciaron el proceso de privatizaciones de empresas publicas en España, crearon el "plan de contrato juvenil" que originó los contratos basura para los jóvenes, legalizaron las ETT para fomentar el trabajo precario o recortaron las prestaciones por desempleo. Ahora con Zapatero van mas allá y pretenden aumentar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años teniendo al país con una tasa de desempleo alrededor del 20%.

Los argumentos que utilizan para querer aumentar la edad de jubilación son que la esperanza de vida es cada vez mayor y hay más pensionistas, por lo que aumentando la edad de jubilación habrá menos pensionistas y mas gente trabajando. Grave error de argumentación. Que la esperanza de vida es mayor y cada vez hay mas jubilados a los que el estado debe pagar la jubilación es cierto. Pero no es menos cierto que el PIB del estado es cada vez mayor y lo será en un futuro? No es menos cierto que la productividad a aumentado considerablemente haciendo que un numero menor de trabajadores produzcan lo mismo o más que hace unos años? No es menos cierto que la plusvalía generada es cada vez mayor? Entonces porque no se controlan las grandes fortunas, los beneficios de las grandes empresas o los fraudes a la seguridad social que están valorados en miles de millones de euros?

Según el gobierno se tienen que sacrificar los que tienen menos, los trabajadores, pero el presidente del BBVA, Francisco González, recibirá por su jubilación una pensión de casi 80 millones de euros, un diputado sólo con trabajar 11 años recibirá la pensión máxima (31.255,56 €) y todo esto cuando un trabajador necesita trabajar 35 años y ni de lejos llegará a cobrar ese "sueldazo".

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