dissabte, 30 d’octubre del 2010

Ni nos domaron, ni nos doblaron, ni nos van a domesticar

Marcelino Camacho, hombre honesto y consecuente con sus ideales a favor de la clase obrera y los mas desfavorecidos. Sufrió exilio, cárcel y torturas durante el franquismo. Fundó el sindicato Comisiones Obreras y perteneció al Partido Comunista en la clandestinidad. De los pocos que no se vendió por una parcela de poder. Pocos pueden morir con tanta dignidad.

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